Tipos de besos sexuales ¿A cuál le apuestas?

Uno de los actos íntimos más antiguo de placer en la historia ha sido el besar. Una muestra de afecto, cercanía o respeto que ha migrado a no darse solamente en los labios. ¿Ya sabes de qué hablamos?

No por nada los labios son una de las partes del cuerpo con más neuronas sensoriales, por lo que al usarlos se desatan un sinfín de sensaciones, llegando a generar incluso más placer que los mismos genitales.

Es bien conocido que para hallar nuevas formas de satisfacción lo más importante es el estar abierto a experimentar, a probar nuevas formas de obtener estímulos, y los labios aquí serán nuestros mejores amigos.

De acuerdo con datos científicos, 5 zonas del cerebro se activan al momento de besarnos, liberando grandes cantidades de oxitocina, adrenalina y dopamina, hormonas responsables de desatar la sensación de bienestar y placer a nuestro cuerpo.

Preliminares

Esta acción, tan arraigada en la sociedad, ha pasado a ser un acto primordial a la hora de demostrar el deseo, una de las mejores herramientas que existe para iniciar el acto sexual en sí, convirtiéndose con esto en la antesala perfecta al orgasmo.

Indiscutiblemente el beso está siempre en la lista de preferidos a la hora de relacionarnos con los demás en el ámbito sexual, sin embargo, existen distintas zonas en las que es sumamente placentero darlo y aquí te las explicamos.

Ten la mente abierta a involucrar labios, lengua, mordidas y muchos chupetazos, te aseguramos que será un deleite para tu receptor.

  1. Beso negro:

Famoso, sí, excitante, también. El Beso negro es uno de los actos más placenteros dentro del acto sexual, debido a que nuestro ano está lleno de terminaciones nerviosas que lo hacen ser una de las zonas más sensibles del cuerpo humano.

El también llamado anilingus consiste en estimular el ano de la pareja implicando besos y lamidas, eso sí, tengan en cuenta hacer una cuidadosa limpieza antes de experimentarlo para evitar posibles infecciones en la zona bucal.

¿Quieres ir más allá? Intenta introduciendo tu lengua por el orificio rectal para estimular las zonas erógenas que rodean el esfínter.

  1. Beso blanco:

¿Y eso que es o con qué se come? Buena pregunta, porque sí, efectivamente implica tragarse algo.

Para muchos este es un acto de confianza que sólo se realiza con parejas sexuales estables por los riesgos para la salud que puede conllevar, pero la decisión siempre es individual.

El beso blanco es la práctica de recibir la eyaculación de la pareja en la boca para luego traspasarla a través de un beso francés al otro, ya sea el propietario del semen o a un tercero implicado en el acto sexual.

Resulta ser una técnica bastante excitante dentro de la cama y fuera de ella.

  1. Beso arcoíris o rojo:

O el mal llamado beso del payaso, ¿sabes a qué nos referimos? Creeos que sí. Este beso es más que especial, pues consiste en darle placer a la mujer en su zona genital mientras esta está en su proceso menstrual.

¿Muy loco? Pues nosotros creemos que es una demostración de confianza, aunque no todos estén de acuerdo, pues hay quienes se abstengan de visitar la zona por esos días. Para gustos los colores, ¿no?

En esta práctica lo excitante es que los fluidos de ambos se mezclen en la boca.

  1. Beso de singapur:

Este si que requiere práctica, ya que no precisamente incluye los besar con los labios, así que se lo dejamos a los expertos o como tarea para tu próximo encuentro.

El beso de singapur o el arte del Pompoir consiste en que, durante el coito o penetración, ósea, cuando el pene esté dentro de la vagina, la mujer comprima o “aprete” sus paredes vaginales para generar una especie de succión o masaje en el pene.

Esta técnica conlleva en la mujer prácticas extendidas por meses para su dominación, nosotros te recomendamos para iniciar las famosas bolas Kegel para los ejercicios de fuerza.

 

¿Luego de leer esto te apetece probar alguno de ellos? Como siempre nuestra razón de ser es inspirarlos a que expandan sus mentes y experiencias sexuales, siempre de la mano de la responsabilidad.

Si tu respuesta es sí, prueba llevarlos a la práctica de la mano de deliciosos lubricantes de sabores, que harán la situación mucho más divertida y excitante.

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